La Colección Cine y Derecho pretende relacionar el arte característico y definitorio del Siglo XX , con el derecho. Arte y Justicia , Derecho y Cine generan un binomio más frecuente de lo que podría pensarse: Testigo de Cargo, Doce hombres sin piedad, Quiero Vivir, El verdugo, Vencedores o Vencidos, recientemente Algunos hombres buenos, Ausencia de Malicia, La hoguera de las vanidades y un larguísimo y constante etc no nos deja lugar a la duda: El Derecho y la Justicia son temas recurrentes en la filmografía de todos los tiempos.
El editar una colección de éste género plantea un reto Editorial de primera magnitud: En primer lugar por que nos dirigimos a un mercado que ni es profesional ni es exactamente para el gran público, lo cual en España genera dificultades logísticas y de edición muy grandes. Éste es un tipo de lector que en los países anglosajones tiene mucha importancia pero que apenas existe en el nuestro: Es pues arriesgado y complicado. Pero también es cierto que la función de una Editorial es la de realizar propuestas sugestivas a sus lectores y con la colección Cine y Derecho lo hacemos.
La Colección que presentamos nace con una doble vocación: Por una lado la de atraer hacia el derecho a un público interesado que quiera acceder a él desde el Cine. Y por otro la de hacer que los juristas vivan su profesión de otra manera. ¿ Cuantos abogados no lo son por que vieron en su momento una película? La relación del Derecho con la sociedad no va en paralelo con la incomunicación que los profesionales del derecho tienen con la misma sociedad cuando hablan de sus asuntos. Un lenguaje críptico y difícil hace totalmente inaccesible los grandes problemas jurídicos al público, que por otro lado se desinteresa por ellos. Éste divorcio, que ya ha sido roto por otras disciplinas ( Historia, Ciencia, Filosofía) con géneros como la divulgación científica , la novela histórica etc, no ha sido abordado por los juristas. Y realmente supone todo un reto que implica el plantearse los problemas jurídicos de forma atractiva, accesible y elegante. Lejos, muy lejos , de la práctica de los escritores y editores actuales.
Ahí tienen pues los cinco primeros títulos, que son sólo los primeros de un amplio proyecto editorial en el que pronto habrá novedades. Espero que disfruten leyéndolos y que descubran , si no son juristas, un mundo totalmente nuevo y hasta ahora vedado .Si son Juristas espero que vuelvan a sentir la emoción por nuestra profesión. Una emoción que muchas veces duerme en el baúl de la rutina.
El Editor. |