Nàdia Arboix, nacida en Barcelona en 2004, sus primeros recuerdos están relacionados con la escritura, cuando de niña se sentaba en el suelo de su habitación y escribía historias. Escribir diarios íntimos fue su gran pasión durante muchos años, al crecer adoptó la escritura como amuleto y desde entonces siempre la lleva en el bolsillo. Observó la vida desde la ventana, entre las páginas de los libros de la biblioteca de su madre, en las plazas de su barrio, en los días de mercado y entre las cuatro paredes de un piso de Gràcia. De naturaleza camaleónica, escribe creando otras realidades, adoptando el cuerpo del otro. Le fascina poder vivir muchas vidas en una sola y ese fue el motivo por el que decidió estudiar Periodismo en El Raval, donde se movió por distintos slams de poesía haciendo su debut en Club Cronopios, donde conoció a Martín, el poeta del pelo verde, que la adentró por el mundo literario, siguiendo por otras comunidades artísticas como Znack Community o La Poètika.