El alma y su destino, el libro del teólogo laico que hoy se presenta en español, fue publicado en Italia en 2007 y en mayo de 2008 se habían vendido ya 120.000 ejemplares, convirtiéndose en un debatido éxito editorial y cultural.

Presentación de Antonio Duato, director de la colección

El alma y su destino, no es un libro normal de teología clásica. Trata de los mismos temas que la teología tradicional, en este caso de la existencia del alma, de su naturaleza espiritual, de la relación con el cuerpo  y de lo supervivencia tras la muerte corporal, pero lo hace de una forma totalmente renovada.

Lo mismo que Santo Tomás en el siglo XIII incorporando a la teología toda la ciencia y filosofía que suponían los escritos de Aristóteles que, curiosamente, legaron a la cristiandad sólo a través de los árabes Averroes y Avicena, el autor en este libro reflexiona sobre todo lo dicho por la teología y los concilios anteriores, pero incorporando en esta reflexión la ciencia y la filosofía modernas.

Este ha sido el gran éxito del libro de Mancuso "El alma y su destino". Que siendo un teólogo académico, formado en la teología clásica, es a la vez un pensador laico, moderno y libre, que habla a los hombres de hoy de los temas de la vida y la muerte que siguen interesando también hoy. A los teólogos clásicos les discute la irracionalidad de muchos de sus presupuestos y formulaciones, incapaces para expresar hoy una fe cristina que él sigue confesando, y al hombre de la calle les explica la fe tradicional de forma que pueda ser comprendida y admitida hoy.

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Por todo ello se puede afirmar que este libro interesa a un público muy amplio: desde el teólogo técnico que encontrará en él una discusión con altura académica al hombre de la calle, creyente o no, que  llega a entender cómo algunas creencias sobre el origen y el futuro del hombre son rechazados por la cultura moderna (los dogmas actuales del pecado original, del infierno, del juicio final por ejemplo) y sin embargo hay un misterio espléndido en esa cumbre de la evolución que es el alma y el espíritu humano, que alcanza unas dimensiones de realidad que es razonable creer que trasciendan el espacio y el tiempo.

Breve Entrevista a Duato

En Italia ha vendido más de 100.000 ejemplares ¿A qué se debe su éxito?

Porque es un libro de teología laica y sobre un tema que sigue interesando al hombre de hoy como siempre: quién soy yo y qué será de mí tras la muerte. Es de teología porque su autor es un doctor y profesor de teología, que conoce y emplea los métodos de la disciplina teológica: expresar razonablemente la fe a partir de las fuentes comunes que son la escritura y la tradición.

¿Por qué este libro no ha sido bien acogido por parte más conservadora de  la Iglesia, tal y como asegura el propio autor?

No podía hacerlo. Técnicamente este libro niega tesis que se consideran dogmáticas. La jerarquía no ha podido tomar medidas contra el autor (como hizo con Küng, Boff, Sobrino…) porque Mancuso es laico y no enseña en una institución eclesiástica sino privada. Pero han aparecido recensiones muy duras en las publicaciones del Vaticano y, lo que ha sido más duro para el autor, la Asociación de teólogos italianos a la que pertenece le ha hecho el vacío sin discutir siquiera con él sus argumentos. 

¿Qué opina de la manera que tiene Mancuso de abordar ciencia y religión?

La ciencia no puede destruir la verdadera religión y la legitimidad de la persona de hacerse las preguntas últimas y de creer que algo le trasciende.  Pero la ciencia, hasta lo que pueda descubrir, debe ser el presupuesto que tiene que tener un hombre religioso para expresar su fe de un modo razonable. Mancuso hoy sigue diciendo como Galileo: "Dios no sólo habla desde la Biblia, sino antes desde la naturaleza y la ciencia".