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1ª Edición / 532 págs. / Rústica / Castellano / Libro
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El expoliar se va a acabar es una obra que combina aportaciones muy diferentes unidas por un denominador común: la reflexión sobre el uso de los detectores de metales y su relación con la conservación del patrimonio arqueológico. Expertos en comunicación, arqueólogos, juristas, miembros de fuerzas y cuerpos de seguridad y otros profesionales han aportado sus diferentes puntos de vista para presentarnos una visión crítica, incisiva y realista sobre los problemas que acechan a la utilización de los aparatos de detección de metales dentro de los límites de la legalidad. Frente a modelos de otros países, en España el uso de detectores de metales está regulado y limitado, subordinándose su uso a la no afección negativa a los bienes arqueológicos. Las ventajas y los retos de esta opción normativa han sido desarrollados de manera certera en las distintas contribuciones y analizados con rigor y desde una perspectiva transdisciplinar, lo que enriquece sin duda el resultado final. Las diferentes maneras de concebir la gestión del patrimonio arqueológico han permitido construir un relato heterogéneo y diverso que constituye un acicate para remover planteamientos más clásicos o centrados en una sola de las poliédricas caras del problema. Así, algunas de las aportaciones ponen de manifiesto la necesidad de encontrar puntos de conexión entre el detectorismo y la arqueología, en los que se respete el ordenamiento jurídico, se salvaguarde el patrimonio arqueológico, pero en los que también se trabaje de manera conjunta en los ámbitos en que ello sea posible. Diversidad de propuestas es lo que encontrarán los lectores y lectoras en sus páginas, todas ellas vinculadas a una idea fuerza que nunca se pierde de vista: el expoliar? se va a acabar.