¿Aún no tienes una cuenta? Crea una ahora y accede a tus listas favoritas, tu histórico de cuentas y muchas más cosas...
Pedidos y atención al cliente
PARTICULARES: 963 392 051 - FAX: 963 615 480 / LIBRERÍAS: 963 600 598 - FAX: 963 694 151
En papel: Entrega en 5-7 días |
|
|
El artículo no está disponible en esta web pero puede encontrarlo en nuestra Librería Ir a la librería | ||
Consultar disponibilidad en tiendas
Consultar disponibilidad en tiendasLos plazos estimados son para pedidos realizados antes de las 14:00h del viernes (salvo error o situaciones especiales: festivos, inventarios,etc).
|
Sevilla, 1626. A su regreso de Flandes, donde han participado en el asedio y rendición de Breda, el capitán Alatriste y el joven mochilero ??ñigo de Balboa reciben el encargo de reclutar a un pintoresco grupo de bravos espadachines para una peligrosa misión, relacionada con el contrabando del oro que los galeones españoles traen de las Indias. Los bajos fondos de la turbulenta ciudad andaluza, el corral de los naranjos, la cárcel real, las tabernas de Triana, los arenales del Guadalquivir, son los escenarios de esta nueva aventura, donde los protagonistas reencontrarán traiciones, lances y estocadas, en compañía de viejos amigos y de viejos enemigos.
«El oro del rey», la cuarta entrega de Las aventuras del capitán Alatriste, la serie novelesca más leída de la década de los años noventa, comienza en Cádiz tras un intento de saqueo por ingleses y holandeses. Allí desembarca Diego de Alatriste y Tenorio, soldado del rey con licencia en Flandes, un héroe cansado que se hace viejo, que sigue tan pobre como al comienzo de la campaña de Breda, hace ya dos años. Le acompaña su valiente y fiel criado ??ñigo Balboa, al que cuida desde la muerte de su padre y que, camino de los dieciséis años, retorna de la guerra con los miembros endurecidos, el temple asentado y cuajado el ánimo. Y que escribe: "Una carta nos esperaba en Cádiz, un amigo en Sevilla y una increíble aventura en la Barra del Guadalquivir".
??ñigo, recordemos, es el narrador de esta serie de aventuras. Es quien retrata una época bronca, violenta y deslumbrante, quien hace vivir de nuevo a personajes ya conocidos por los lectores. Porque en «El oro del rey» aparecen viejos amigos y viejos enemigos de Alatriste.
La citada carta, en la que se habla de un asunto de espadas y se menciona al conde de Guadalmedina (escolta del rey en sus correrías nocturnas y admirador de Alatriste), la ha redactado una de las principales plumas -y espadas- de aquel tiempo -y de estos-: don Francisco de Quevedo. El genial escritor, en un contexto más que adecuado, afirmará: "Poderoso caballero es don Dinero". Y recibirá a su buen amigo el capitán con estas palabras: "Habrá que matar. Y puede que mucho".
Hay que matar, aunque Alatriste e ??ñigo hayan dejado atrás los campos de batalla y se encuentren en Sevilla, "la ciudad que era la más fascinante urbe, casa de contratación y mercado del mundo, galeón de oro y de plata anclado entre la gloria y la miseria, la opulencia y el derroche, capital de la mar océana y de las riquezas que por ella entraban con las flotas anuales de Indias". Una de esas flotas está a punto de arribar. Y, como bien sugiere el título de la novela, el caudal de oro que alimenta a España y al resto de Europa y del mundo va a cobrar un relevante papel. Además, el rey Felipe IV va a actuar de testigo -y no meramente pasivo- de cuanto ocurra, ya que se encuentra en la capital hispalense para dar un escarmiento a alguien que roba más de lo normal: el octavo duque de Medina Sidonia, que se ha convertido en un pequeño rey de Andalucía.
Pero en Sevilla también encontraremos a Angélica de Alquézar. La menina de la reina va a remover las heridas profundas que se mantienen en el corazón y en la memoria del joven ??ñigo desde la primera entrega de «Las aventuras del capitán Alatriste». Por amor hacia quien es tanto su amante como su enemigo, ??ñigo va a caminar al borde del abismo. Y va a demostrar que conoce los secretos de la esgrima. Porque Angélica es más fiel a los suyos que al amor. Y los amigos de Alatriste son sus enemigos. No en vano es la sobrina del intrigante y malévolo secretario real, Luis de Alquézar.
«El oro del rey» es una novela de aventuras, en la que abundan los combates a espada y las estocadas pueden venir de cualquier parte. Pero además es una novela histórica donde Pérez-Reverte se interna por un imperio en decadencia, gravemente enfermo de corrupción. Intrigas como las descritas en el libro le sirven a ??ñigo de Balboa para afirmar: "Aquella España nuestra, y el mismo Alatriste con ella, se deslizaba hacia un pozo sin fondo y sin esperanza del que nadie iba a sacarla, ni a sacarnos, en mucho tiempo y en muchos siglos".
Arturo Pérez-Reverte (Cartagena, noviembre de 1951) se dedica en exclusiva a la literatura, tras vivir 21 años (1973-1994) como reportero de prensa, radio y televisión, cubriendo informativamente los conflictos internacionales en ese periodo. Trabajó 12 años como reportero en el diario ´Pueblo´, y 9 en los servicios informativos de Televisión Española (TVE), como especialista en conflictos armados. Como reportero, ha cubierto, entre otros conflictos, la guerra de Chipre, diversas fases de la guerra del Líbano, la guerra de Eritrea, la campaña de 1975 en el Sahara, la guerra del Sahara, la guerra de las Malvinas, la guerra de El Salvador, la guerra de Nicaragua, la guerra del Chad, la crisis de Libia, las guerrillas del Sudán, la guerra de Mozambique, la guerra de Angola, el golpe de estado de Túnez, etc. Los últimos conflictos que ha vivido son: la revolución de Rumania (1989-90), la guerra de Mozambique (1990), la crisis y guerra del Golfo (1990-91), la guerra de Croacia (1991) y la guerra de Bosnia (1992-93-94). En la actualidad, escribe una página de opinión en ´El Semanal´, que se ha convertido en una de las secciones más leídas de la prensa española. Su obra está compuesta por: «El húsar» (1986), «El maestro de esgrima» (1988), «La tabla de Flandes» (1990), «El club Dumas» (1993), «La sombra del águila» (1993), «Territorio comanche» (1994), «Cachito (Un asunto de honor)» (1995), «Obra breve» (1995), «La piel del tambor» (1995), «Patente de corso» (1998) y «La carta esférica» (2000).Y la serie de Alatriste: «El capitán Alatriste» (1996), «Limpieza de sangre» (1997), «El sol de Breda» (1998) y «El oro del Rey» (2000).