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1ª Edición / 182 págs. / Rústica / Castellano / Libro
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La tipología lingüística busca clasificar los tipos de lengua atestiguados de acuerdo con una propiedad o preferencia correlativas específicas. Con base en esta corriente analítica, el estudio da pie a afirmar que, tanto para el dominio clausal, i.e., relativo al orden de verbo y objeto directo, como para el extraclausal, i.e., patrones que muestran correlación aparente con la posición del verbo y el complemento directo más allá de la cláusula, los textos románicos lusohispánicos del siglo VIII participaban, muy posiblemente, de un latín que iba dando paso al iberorromance primitivo a través de un largo y dinámico período transitorio. Incluso la evidencia aquí aducida permite afirmar que, bajo la óptica del orden de palabras, el latín del que participan los textos analizados no es ya tan latín, pues sus patrones tipológicos se acercan, de manera considerable, a los de las variedades románicas correspondientes, donde imperaba el orden verbo-objeto. Por este acercamiento sintáctico, al siglo VIII luso-hispanorrománico muy probablemente lo regía no una modalidad de verbo final como estructura dominante, i.e., objeto-verbo, sino más bien un sistema lingüístico con verbo-objeto como orden clausal básico. Gracias a los estudios de tipología sintáctica, la estructura verbo-objeto, que quizá subyacía al habla de la Alta Edad Media ibérica, se vuelve, justamente, cada vez más palpable y visible en nuestros días.